En una conjunción dos planetas se encuentran en un mismo grado con respecto a la Tierra, uno en el mismo meridiano o el mismo plano vertical con respecto al otro. La Luna nueva es una conjunción, ya que al situarse delante del Sol, le es imposible reflejar su luz y se vuelve invisible. Las ocultaciones invisibles o conjunciones planetarias son siempre desfavorables.
En el caso de las conjunciones o acumulación de conjunciones, dos o más planetas están en fila en el universo. Generalmente el planeta que está más cerca de la Tierra es el que va a influir en nuestro planeta y el mundo vegetal. Si la influencia de la conjunción es más fuerte que la luna sideral de ese día, entonces hay desacuerdos cósmicos, y como consecuencia las plantas se irritan y sufren en su crecimiento.
El efecto negativo aumenta si la luna o un planeta oculta otro, en este caso hablamos de eclipse. La siembra en estos momentos impide el crecimiento de la planta o daña su fuerza regenerativa. Las conjunciones vienen señaladas mediante su signo correspondiente en los diferentes calendarios lunares.
En nuestra época, las pequeñas cuestiones se desarrollan hasta el infinito, mientras que las preguntas fundamentales permanecen sin respuesta.
Goethe