Laughing Buddha - Feminizada y fotodependiente - Barney's Farm

¿Cómo cultivar de Laughing Buddha?

Cultivar esta maravillosa variedad de Barney´s Farm, puede ser una de las experiencias más excitantes que hayas podido tener en cuanto a cultivo se refiere. Este cruce entre sativas, nos hará que estemos pendientes de ella gracias a la belleza y a su hermoso porte. Esta planta es de tamaño intermedio con gran cantidad de ramas laterales y una punta central larga y cargada de internudos. Su crecimiento es vigoroso pero algo lento incluso también su floración, esta es lenta pero constante y llegando al punto de encontrar la planta repleta de pegajosa resina, incluso en las hojas inferiores que normalmente no llega la resina.

Cultivo indoor de Laughing Buddha de Barney´s Farm

Esta planta no es muy exitosa en interior debido a su largo tiempo de floración, no obstante si tienes paciencia y te gusta cultivar cepas muy diferentes al resto, esta será tu planta. Al tener descendencia sativa, esta planta es de altura intermedia, por lo que tendremos que revisar bien la altura de los focos. Su forma algo espigada en interior no significa que vaya a darnos poca producción, al contrario de lo que parece y con algo de paciencia podremos cosecharla entre 90 a 95 días, siendo una cosecha de entre 300 a 400 g/m2 con al menos 12 ejemplares.

¿Cómo és su cultivo en exterior?

En exterior es donde podemos sacar algo más de producción con esta variedad, sigue siendo muy lenta, hasta mediados de Noviembre no la tendremos para cosechar, eso sí tendrenmos un ejemplar que puede llegar a darnbos entre 500 a 600 g/planta. Sus cogollos son algo espigados, pero su olor es inconfunble a limón y frutas tropicales, lo que se traduce al fumarla en un auténtico placer. Es más dócil que en interior y requiere de menos cuidados, aunque siempre habrá que tener el ojo encima y entutorarla para evitar que las ramas caigan al suelo y se estropee la cosecha.

Sabores y efectos

De sabores cítricos con toques dulzones a frutas tropicales, así es como nos dejará la garganta una vez consumamos las primeras caladas durante un largo rato. Su efecto es muy energizante y sobre todo duradero, teniendo que esperar al caer la tarde o noche para que nos entre el letargo que deja después de un viaje estelar en toda regla.