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Iluminación Cultivo Interior - Tutoriales y Venta | Ecomaria

Iluminación artificial para el cultivo interior

Enorme catálogo de productos destinados a la iluminación para el cultivo de plantas en interiores, armarios e invernaderos. Como todos sabemos, las plantas necesitan del Sol para crecer y florecer. Gracias a la tecnología actual, los clientes puedes comprar fácilmente sistemas lumínicos capaces de emitir a la perfección la luz solar. Con la compra de bombillas, reflectores, balastros… los cultivadores somos capaces de crear ciclos de luz totalmente personalizados e inducir a las plantas sus diferentes ciclos. Esta posibilidad de controlar los ciclos nos permite cultivar sin estar pendiente en los ciclos estacionales propios del hemisferio donde nos encontremos. Podremos aumentar tanto el número de cosechas por año como la cantidad de cosecha en seco por tanda realizada.

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¿Por qué es importante la luz para las plantas?

Las luces representan el elemento más importante de las plantas que se cultivan en interiores. Debido a que no pueden recibir luz natural, la luz artificial es necesaria para simular al  Sol y generar el mismo tipo de energía. Las plantas necesitan la luz para realizar la fotosíntesis, la cual es vital para la producción de azúcar y tejidos, es decir, para seguir alimentándose y creciendo. Una fuente de energía indispensable para la vida y que será obligatoria de comprar si queremos cultivar en indoores o aumentar la producción en invernaderos.

Las plantas también necesitarán una distribución uniforme de la luz para que el crecimiento sea congruente. Muchos cultivadores profesionales conectan un sistema de rieles que permite mover las luces para que los rayos influyan durante todas las partes de la planta. El material reflectante también ayuda a mejorar la cantidad de luz que reciben las plantas. Esto puede ser tan simple como revestir las paredes con papel de aluminio o simplemente pintar las paredes de la habitación con pintura blanca brillante. También disponemos de productos para revestir las paredes con reflectante y aprovechar al máximo la luz de los focos.

Las mejores tecnologías de iluminación para cultivar

La mayoría de los productores de cannabis limitan sus opciones a una de las siguientes opciones: lámparas fluorescentes, LEDS, LECS  y lámparas HID (descarga de alta intensidad), las conocidas como HPS (Sodio de Alta Presión) y HM (Halogenuros metálicos). Es complicado asegurar cuál es mejor o peor para nuestro cultivo, cada uno tiene sus ventajas, inconvenientes y funciones concretas. Si eres principiante y quieres empezar por lo fácil y barato, le conviene optar por las lámparas HPS. Sirven tanto para crecimiento como para floración y tienen la potencia suficiente como para generar una luz que haga crecer unas plantas grandes, frondosas y con cogollos bien formados.

Ahora bien, el Sodio tiene varios inconvenientes como el calor emitido y el consumo eléctrico que ocasiona en la factura. Es por ello  que existen las otras tecnologías que cada día van mejorando sus prestaciones y en la actualidad se encuentran en el mismo nivel de calidad y producción que los sodios. Por ejemplo los LEDs y los LECs consumen menos electricidad que los sodios siendo el rendimiento casi idéntico. El problema con estas tecnologías más nuevas es que el coste inicial es más elevado, aun así, con el tiempo, suele salir rentable la inversión. Antes de comprar un sistema de iluminación para cultivar marihuana en interior se deben tener las cosas claras y saber a ciencia cierta que sistema encaja mejor en mi sala de cultivo o armario. Si tienes cualquier tipo de pregunta puedes contactar con nuestro equipo de atención al cliente, estamos para ayudar.

Ciclo de luz (horas) ideal para el cannabis

Durante la primera fase de germinación las semillas no necesitarán luz, pero si necesitarán algo de luz cuando los brotes comiences a ser visibles. Una vez entramos en la delicada etapa de las plántulas, las luces deberían estar algo cerca de las plantas de marihuana siempre que no generen mucho calor. Para las plántulas o ejemplares recién nacidos, un foco de Sodio puede ser demasiado, por lo que puede ser aconsejable usar luces fluorescentes o de bajo consumo durante las primeras semanas.  El ciclo de luz también debe ser relativamente constante desde el principio con alrededor de 16 a 18 horas de luz por día. Este será el ciclo de luz durante toda la fase de crecimiento hasta que se baje a 12 horas de luz al día cuando queramos comenzar la floración.

Dependiendo de la cepa en particular, algunas plantas podrían soportar un régimen de luz más intensivo. El cannabis tiende a absorber la luz vorazmente porque es una planta que necesita de alta energía para formar unos buenos cogollos. Se sabe que algunos cultivadores exponen sus plantas a un ciclo de luz con 20-24 horas completas de luz al día, sobre todo se utiliza en genéticas de floración automática. La mayoría de los cultivadores no tendrán que ir a esos extremos, pero es posible que deba aumentar el ciclo de luz a más de 18 horas en algún momento si desea mejorar el crecimiento.

Distancia de la iluminación con las plantas

Lo ideal será siempre mantener lo más cerca de las plantas las bombillas de la iluminación para que reciba la máxima cantidad de lúmenes pero sin quemar las puntas ni dañar ninguna parte. Por ejemplo, para las plántulas pequeñas se pueden usar fluorescentes y sistemas de iluminación de bajo consumo. No producen mucho calor y se pueden bajar a solo 10 cm por encima de las hojas superiores.

Las instrucciones de las luces pueden indicarle que las mantenga a cierta distancia de las plantas, pero el cannabis requiere mucha energía lumínica y tiene mayor aguante que otras especies. Si utilizas iluminación que no de calor puedes apurar lo máximo la distancia en todas las fases. En caso de utilizar fuentes más potentes deberás alejar la bombilla unos 50-70 centímetros. Recuerda ajustar la distancia según lo que te pida tu cultivo. Si ves que se estira o espigan mucho hacia arriba quizás debas de bajar la altura de la iluminación, por el contrario, si  observas quemaduras, deberás subirlas en cuanto detectes el problema.

¿Qué es el Espectro de luz y cuál usar para el cannabis?

También debe tenerse en cuenta que cada sistema de iluminación emite un espectro de colores diferentes. Cuando hablamos de luz visible, nos referimos a todos los colores que podemos ver que son: naranja, rojo, azul, amarillo, verde y violeta. La marihuana tiende a prosperar bajo una luz fuerte en el espectro rojo. Esto promueve la fotosíntesis, que es vital para la producción de tejidos durante el crecimiento vegetativo. Las lámparas de sodio de alta presión (HPS) producen la mayor cantidad de luz en el espectro rojo (y la mayor cantidad de luz en general) y, a menudo, son la mejor opción durante prácticamente todas las etapas del proceso de cultivo. El uso de cualquier cosa que sea alta en el espectro verde producirá plantas marchitas e improductivas en general. Esto se debe en gran parte a que las plantas reflejan la luz verde por completo.

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