Critical Orange Punch - Semillas frescas y feminizadas - Dutch Passion

Una Critical con raíces españolas

Las semillas feminizadas de Critical Orange Punch tienen parte de su origen en España gracias a la aportación de una selección única de la laureada Kritikal Bilbo. Inicialmente la genética pareció junto con el cruce de dos clones élite, el Grandaddy Purps y el Orange Bud.

En un primer momento no era una planta muy productiva, destacaba por sus sabores tan pronunciados. Fue entonces cuando la cruzaron con una especie de alta producción y grandes contenidos en THC como era la Bilbo hasta obtener un ejemplar con producciones XXL, rápida en madurar los cogollos y con potencias extremas de consumo.

Apariencia visual de la planta

Las plantas de este tipo de marihuana crecen vigorosamente alcanzando unos 150 cm de altura. La parte más vistosa será sin duda la punta central, la cual se hincha como botellas de 2 litros sin pestañear.

Apenas tiene follaje por lo que la producción está maximizada por m2 y la aireación interna es perfecta para evitar la aparición de hongos dentro de sus enormes cogollos. Las flores una vez cosechadas presentan un tono cristalino por la presencia exagerada de tricomas.

¿Cómo se cultiva la Critical Orange Punch?

El cultivo de Critical Orange Punch está recomendado incluso a los primerizos. La genética crece bien con cualquier método de cultivo y en cualquier clima, aunque donde brilla de verdad es en el mediterráneo con días largos y mucho Sol directo.

No necesita grandes dosis de fertilizantes ni cuidados, aunque sí que recomendamos hacer podas regulares para quitar las ramas de abajo más débiles y las hojas más molestas, así lograremos que entre una buena aireación en el interior de la planta.

Con la aparición de las primeras flores, empezaremos a contar 8 semanas o menos para el corte final. Si todo el proceso ha ido correctamente, deberás cosechar una gran producción de flores duras como piedras y brillantes por la gran cantidad de resina que las recubre.

Sabores y aromas de los fenotipos

El consumo de sus cogollos tiene un sabor a limón y naranja muy pronunciado, de ahí el origen del nombre. El aroma sin embargo recuerda al típico hachís afgano de primera calidad. Cabe recordar que no siempre aparecen los tonos cítricos, su lejano origen Kush se manifiesta en algunos fenotipos destacando el sabor a baya afrutada con toques a tierra.